Hay voces que pocos escuchan al igual que caricias que muy
pocos se detienen a sentir, solo los “locos” se han atrevido a
tener ese contacto y formar parte del viento, del agua, de la tierra y
todo lo que en ella vive. Solo los “locos” buscan salvarla y son tan pocos ante
un mundo que necesita de muchos.
Este artículo va dedicado a todos los “locos”, a los de ayer,
a los de hoy y a todos los que forman
parte de esta gran lucha a la que pocos se unen por no recibir ningún beneficio
económico y con esto, no hago más que referencia a la lucha ambiental, esa que
cada vez necesita de más y más personas que entiendan que es una lucha por la
vida, por tú vida y la de las generaciones futuras.
A esos defensores que
llevan las palabras de auxilio que a gritos nos pide la naturaleza a quienes no
se han detenido a escucharla y que por eso los han tildado de chiflados, es entonces
donde tome las palabras del reconocido ecologista trujillano Dr. Orlando Montes,
en la que se dirigía a un grupo de jóvenes montañistas y en medio de una charla
con una frase definió a los ecologistas como “locos” y aclaro que así les decía la gente, asimismo
con un tono de reclamo un poco satírico expreso “Como nos hacen falta más
locos”, haciendo referencia a esa gran necesidad de que se sumen más personas y
sobre todo jóvenes a la defensa del medio ambiente, a ese contacto directo con
nuestra madre tierra, con la Pachamama como nuestros indígenas la llamaban.
Ecologistas Trujillanos
La lucha por este nuestro hogar ha venido llevándose a cabo
desde muchos años atrás, en algunos casos ha triunfado y en otros tantos no se
ha logrado el objetivo, siendo esto el resultado de una especie que se ha encargado
de destruir y de convertir el planeta en un rico festín, devorando así cada partícula de vida existente solo para
cubrir necesidades económicas y otras resumidas en un consumismo extremo que
nos lleva al suicidio de la humanidad. Es por esto que ya, viendo el resultado
de la contaminación que por años ha sido vista como algo banal, es hora de
encender la alarmas y tomar cartas en el asunto y realizar acciones que nos
conviertan en agentes de cambio, pues está en juego la existencia del ser
humano.Recordemos que el hombre no puede vivir sin la naturaleza pero la
naturaleza si puede vivir sin el hombre.
Trujillo te
necesita.
Nuestro estado al igual que Venezuela es muy rico en cuanto
a ecosistemas y biodiversidad se refiere, puesto contamos con una rica flora,
fauna y muchos caudales de agua los cuales han venido disminuyendo en los
últimos años a causa de la intervención de la mano del hombre. Es por ello que
Trujillo te necesita hoy más que nunca, es momento de tomar conciencia y
atender el llamado que la naturaleza nos está haciendo, nuestros ríos están
muriendo lentamente debido a esto son vulnerables a las sequias extremas y
corren el riesgo de desaparecer para siempre y es triste ver como la población
que se beneficia de estas fuentes de vida no hacen nada por preservar las cuencas acuíferas.
Ríos Motatán, Momboy, Castán, Carache
Tenemos unos ríos que nos dan vida y que incluso en un
tiempo eran punto de encuentro para compartir en familia y amigos debido a que
el caudal de agua era mucho mayor al de ahora. En estos momentos esos cuerpos
de agua agonizan por culpa nuestra y porque nunca pensamos que la acciones que
realizábamos iban a repercutir en su disminución; la tala, la quema y la gran
deforestación presente cerca de las nacientes de agua han hecho que nuestros
ríos y quebradas estén desapareciendo y lo más doloroso aun es que son pocos los
“locos” que le han dado una mano amiga a nuestras fuentes de agua, páramos,
bosques y cada ser vivo que permite un equilibrio en nuestro ecosistema.
A gritos piden auxilio el Castán, Motatán, Momboy y otros
tantos afluentes que por sus aguas
corren la irresponsabilidad del
trujillano y su falta de amor por la naturaleza, al igual que la desatención de las autoridades y la poca
justicia ambiental con la que contamos. Es por
ello que basta ya de la burocracia imperante dentro de las instituciones
ambientales para poder resolver los casos que hoy dejan grandes huellas en
nuestro país y estado Trujillo.
Ya para concluir, hay que reconocer el gran trabajo de los ecologistas que dia a dia luchan por un mundo mejor y de igual forma recordar que Trujillo te necesita para que podamos
seguir viendo verdes nuestras montañas
llenas de una fauna y flora majestuosa, nuestros ríos fuentes de vida y que
adornan nuestra tierra y algo que no podemos olvidar esos maravillosos páramos
que nos engalanan con su neblina y bajas
temperaturas. Es por ello debes ir a formar parte del activismo ecológico
regional para que comencemos a sembrar vida para salvar nuestra Madre Tierra,
todavía tenemos tiempo, poco pero lo tenemos; por eso forma parte de esta esta
lucha y vuélvete “loco” de vez en cuando.