El municipio Rafael Rangel no se escapa
de la crisis de transporte que se vive en el estado, la escasez de unidades y
el alto costo de los pasajes ponen en jaque a los pobladores de la tierra de
santos y sabios, quienes han optado hasta por caminar para llegar a sus lugares
de trabajo.
Tal es el caso de quienes laboran en
Isnotú, San Pedro, Sara Linda y San Juan que deben pedir cola para movilizarse,
mientras el alcalde José Leonardo Chirinos “se hace de oídos sordos” ante las súplicas de
los rangelianos.
Todo un calvario
Personas a la espera de transporte mientras que los Bus Trujillo son utilizados para actos políticos |
Rangelianos informaron a nuestro equipo
reporteril que hasta la fecha, sólo dos unidades cubren la ruta Betijoque-
Isnotú, en una línea que contaba anteriormente con más de 15 busetas, de las
cuales la mayoría se encuentran paralizadas por falta de repuestos.
A la espera de soluciones
La semana pasada se estableció una mesa
de trabajo con educadores de las instituciones ubicadas en San Juan, Isnotú y
San Pedro (las zonas más afectadas) con la autoridad municipal para solventar el
traslado hacia estos lugares, pero, hasta ahora el problema persiste y se
agudiza con el pasar de los días.
Rangelianos esperan que el burgomaestre se aboque al llamado del pueblo. “Así como amenaza a los que se metan
con él, que solucione los problemas” afirmaron los afectados.