Al menos 10 boconeses se han quitado la vida este 2017. Foto: Referencial. |
Karley Durán. CNP-. 23.921.
@karley_ale
Boconó, municipio
trujillano de la región andina, se ha caracterizado por ser pacífico, de
paisajes hermosos, gente amable y con una idiosincrasia tan arraigada que sus
moradores se conocen por tímidos y muy reservados.
La inseguridad
como en todas las ciudades del país ha hecho estragos, pero en la lista del
estado, se ubica entre los últimos con mayor índice de delincuencia. No
obstante, repunta entre los municipios con más suicidios.
De hecho, este
año 2017 se han registrado más de 10 casos y sólo en el mes de agosto tres
boconeses decidieron acabar con su vida. Uno al ingerir sustancias químicas y dos
ahorcándose. El último fue Freddy Teodosio González Godoy de 61 años edad, quien
cayó en depresión por no encontrar medicamentos.
Tras el alza de
este fenómeno, la corresponsalía de Trujillo Digital en Boconó, consultó a la psicóloga
clínico Fransua Quevedo, egresada de la Universidad Arturo Michelena del estado
Carabobo; la cual detalla cuatro factores por los cuales los boconeses se
suicidan, además siempre muy seguidos.
Fransua Quevedo: "Tres de cada cinco pacientes presentan problemas con indicios de suicidio". |
La situación económica del país; el poco poder adquisitivo, la escasez de alimentos y medicamentos ha desplazado la principal causa de los suicidios: el problema amoroso.
“Si a una persona
le diagnostican cáncer, no consigue los medicamentos y se deprime por la
enfermedad, generalmente considera el suicidio como una solución. Claro con un
grado de inconsciencia y patologías como desesperación y desesperanza porque las
cosas no son equilibradas”, considera la psicóloga.
Esto explica por
qué en los últimos tiempos adultos mayores, que se creen una carga familiar y, adolescentes
que sienten no tener las posibilidades para enfrentar un embarazo u otra
situación, terminan suicidándose.
Los problemas psicológicos
Imagen referencial/Créditos El Telégrafo |
Otro factor
incidente en los suicidios no sólo en Boconó sino en la mayoría de los pueblos
de Venezuela son las condiciones psicológicas de cada persona.
“Patologías como
la esquizofrenia, depresión, paranoia, ira o rencor, producto de una
experiencia vivida de niño, una violación o bullying; que no hayan sido
canalizados o tratados medicamente, son altamente peligrosas”, asevera Quevedo,
quien al detectar tres de cada cinco pacientes con intenciones de suicidio,
insta a estar atentos ante las siguientes características de un episodio
depresivo mayor:
- Estado de ánimo depresivo la mayor parte del día.
- Falta de interés en todas o casi todas las actividades.
- Pérdida o aumento de peso, sin hacer régimen.
- Insomnio o hipersomnia cada día.
- Agitación o enlentecimiento psicomotores.
- Fatiga o pérdida de energía cada día.
- Sentimientos de inutilidad o de culpa excesiva o inapropiada.
- Pensamientos recurrentes de muerte, ideación suicida recurrente.
“La cultura del
boconés se resume en monotonía. En el municipio hay pocos lugares cercanos para
la distracción, no existen terapias ocupacionales y carece de fuentes de trabajo”, explica la especialista.
Adicionalmente, asegura que los boconeses
tienen poca autoestima. “Hay muchos que no se tienen amor así mismo, sufren de conformismo,
flojera y facilismo para obtener las cosas. Todo eso influye en el acto de
suicidio”.
Por eso recomienda crear equipos multidisciplinarios
que promuevan constantemente actividades recreativas. Y en el caso individual,
buscar formas didácticas y productivas de distracción, “manejar bicicleta, ve
al río, camina por las piedras o pinta cuadros; porque el ocio es el principal
enemigo del ser humano”.
Aunque parezca
extraño y hasta increíble; “el clima frío característico del Jardín de
Venezuela, en su estado físico puede deprimir a las personas, hacerlas sentir
solas y agobiadas”.
Para la psicóloga
clínico Fransua Quevedo, es necesario trabajar la consciencia propia. Que cada
quien sea más creativo ante situaciones adversas. “No refugiarse en los
problemas de los demás y no dejar que cosas naturales como el cambio de clima u
otras simples realidades de la vida nos afecten”.
Los familiares
deben estar atentos al aislamiento, el llanto y la negación ante todo de
cualquier persona; puesto que son indicios de que algo no está bien. “Aunque
las personas que deciden suicidarse, en su mayoría, no lo dicen y quién si lo
hace es por llamar la atención o manipular; por eso importante la medicación de
especialistas”, finaliza.
La psicólogo clínico recomienda terapias ocupacionales además de medicarse si el problema es patológico. |