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Robert Castellanos E/CS
La Vinotinto es la única que
hace posible que todos los venezolanos estén unidos como realmente deberían
estar siempre. Por 90 minutos cada habitante de Venezuela se olvida de los
problemas que rodean al país y siente, vive, goza y transmite su pasión por el
color que une a toda una nación.
El
gol de Salomón Rondón que le dio los tres puntos a la Vinotinto ante la
selección de Colombia es la alegría que le hacía falta a Venezuela. A
pesar de que el país está totalmente polarizado y vive una situación de crisis,
la felicidad invadió el corazón de 30 millones de habitantes que desde Venezuela
alienta con orgullo, fe y esperanza a su selección.
Con esta victoria, Venezuela
suma 8 partidos seguidos sin perder en fase de grupos del torneo más longevo del
mundo. Fueron 11 los guerreros que salieron al estadio “El Teniente” de
Rancagua, más los tres relevos que ingresaron en la parte complementaria y, sin
duda alguna, todo el plantel en general, los que hicieron posible que por un
día Venezuela se sintiera en jubilo y estallara de alegría por ese gran triunfo
ante nuestro país vecino.
El grito de gol de cada uno
de los venezolanos que se encuentra en el país se debió sentir en Chile para
contagiar a la selección nacional de este ánimo que reciben de parte de todos.
No
es justo apoyar a otro equipo
No se explica que existan
venezolanos que griten goles de Brasil, Argentina, Chile… Y que incluso
apuesten en contra de Venezuela. Ya es hora de que el venezolano deje de apoyar
a otras selecciones y comience a sentir mucho más amor por nuestros colores.
Los jugadores que visten
esta camiseta vinotinto la sudan, la quieren, la adoran y luchan por ella para
dejar el nombre del país en alto.
Cortesía: www.lapatilla.com |
Cada jugador que sale al
campo y juega con la selección nacional lo hace con gozo, con orgullo, con
amor; pero sobretodo con la responsabilidad y el compromiso de ganar y hacer
que La Vinotinto, poco a poco, vaya cosechando victorias y haciendo historia en
el mundo futbolístico.
Falta
de humildad de los colombianos
Es cierto que Colombia se
encuentra en los primeros puestos del ranking mundial de la FIFA. Hizo una labor
excelente en la Copa del Mundo de Brasil 2014 donde hasta los venezolanos se
sintieron orgullosos, pero el fútbol es imprescindible y cualquier cosa puede
pasar.
Los colombianos, a través de
las redes sociales, denigraron a La Vinotinto y daban por hecho una victoria de
su país. No es un secreto; línea por línea Colombia tiene jugadores más
potentes que Venezuela pero cuando la pelota comienza a rodar gana quien mejor
haga el trabajo y, por supuesto, quien meta más veces la pelota bajo los tres
palos.
Precisamente
eso hizo nuestra selección ante los cafeteros. Jugar mejor y meter el único gol
del encuentro. Algunos periodistas colombianos, en la
previa del partido, alegaban que Colombia no debería tener mayores complicaciones
ante Venezuela, como si nuestra selección aún fuera “La Cenicienta” de
Sudamérica.
Un aficionado colombiano
expresó en una entrevista para el programa “Balón Dividido” transmitido por la
cadena ESPN, que “ni el más pesimista de los colombianos se imaginaba este
resultado”. Lo que demuestra que jamás respetaron a La Vinotinto como un digno rival.
El día del partido (14 de
Junio) en Colombia fue Tendencia en Twitter (TT):
#CuandoColombiaMetaElPrimerGol y, lo mejor de todo fue que Venezuela derrotó a
la selección cafetera en la Copa América y en el suramericano femenino de Futsal
1-0 y 2-0 respectivamente.
La
Vinotinto está para grandes cosas
Esta selección que hoy nos
representa en la Copa América puede lograr grandes cosas en este torneo y en el
premundial de Rusia 2018. La Vinotinto ha tenido distintos procesos y en cada
uno de ellos ha evolucionado. Hay muy buenos jugadores que tienen con qué para
llevar a Venezuela al Mundial.
En el partido contra
Colombia, solo un jugador de la titularidad milita en el fútbol criollo; Alain
Baroja, quien es el portero del Caracas FC. Esto no se ve muy a menudo en la
oncena vinotinto. Ya Venezuela no es “La Cenicienta”. Ya a Venezuela la
respetan dentro del terreno de juego.
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Podemos lograr una hazaña en
esta Copa pero solo si cada uno de los que vivimos en este maravilloso país
mantenemos la fe y la esperanza en nuestros jugadores. Ellos se encargaran de
hacer el resto.