Cortesía Rafael Ángel Terán |
En la historia quedaron plasmados
aquellos días en los que el sonido del Ferrocarril de La Ceiba despertaba todo
a su paso, los motatanenses recuerdan cómo aquella máquina trajo tanto
desarrollo para la tierra de la caña, la piña y el tambor y para la región.
Bajo el mandato de Antonio Guzmán
Blanco, comenzó la construcción del
Ferrocarril, con él se facilitaría el transporte de productos agrícolas en el
estado Trujillo, para 1883 el primer tramo de la obra ya estaba terminado, 12
años después la estación de Motatán entraría en funcionamiento.
Te contamos las curiosidades del Ferrocarril de La Ceiba
El Siervo de Dios viajó en el Ferrocarril
Cortesía La arepa en línea |
Luego de haber estado en
Europa donde hizo estudios y se le encomendó traer la dotación para el Hospital
Vargas de Caracas, de paso hacia el terruño al no más desembarcar en La Ceiba,
aquel mismo año 1888, se subió al tren que además de causarle emoción le
ahorraría el sacrificio de otros tiempos cuando camino de Isnotú, su pueblo
natal en las serranías trujillanas, las bestias y el andar riesgoso y cansón,
dominan largas jornadas.
El encuentro con el
moderno medio de transporte establecido por iniciativa del señor Roncajolo
ocurre justo cuando estaba desatada la mortandad desencadenada por la fiebre
amarilla a cuyas víctimas el doctor Hernández le dispensa los auxilios a su
alcance como médico y buen samaritano que era.
Transportó el monumento de Bolívar y Morillo
Cortesía DLA |
En 1911, el escultor marabino Pedro
José Rojas recibió en la estación de Motatán el monumento conmemorativo del
Abrazo de Bolívar y Morillo que sería instalado en Santa Ana, municipio Pampán.
Esta obra fue esculpida en Paris por Lorenzo González.
En su construcción se invirtieron Bs. 8 millones
El francés Benito Rocanjolo fue el
encargado de la construcción de la línea férrea, para la obra fue invertido un
capital de Bs. 8 millones según el informe presentado al Ministerio de Obras
Públicas para ese entonces.
Ese mismo informe explica que cada
kilómetro tuvo un costo de Bs. 98mil 150, además el Ferrocarril contaba con
tres estaciones, la principal ubicada en La Ceiba, la central en Sábana de
Mendoza y la terminal estaba asentada en el municipio Motatán.
Se pensaba construir una estación en Valera
Cortesía Rafael Angel Terán |
En los planes de la vía férrea figuraba
la construcción de una estación en el municipio Valera, sin embargo esta nunca
se realizó, muchos afirmaron que la falta de una estación en la ciudad de las siete colinas retrasaba el desarrollo agrícola y pecuario en la urbe de Mercedes
Díaz.
Una mujer apareció
muerta en los rieles
En la
memoria y cuenta del Ministerio de Obras Públicas se reseñan distintos eventos
que sucedieron en el Ferrocarril de La Ceiba, uno de los que figura es el
hallazgo de una mujer en los rieles, se desconoce la razón y los datos de la
fallecida.
Muchos se oponían a la construcción del Ferrocarril
Los dueños de arreos de mula y de
posadas se oponían a la construcción de la vía férrea, colocaban piedras,
alambres y hasta clavos en el enrielado, incluso causaban daños a las líneas
telefónicas.
No se permitían
animales
Una de
las reglas del Ferrocarril de La Ceiba prohibía la admisión de perros y otros
animales en los coches de los pasajeros.
El mejoramiento de carreteras contribuyó a su cierre
El 31
de agosto de 1941 el Ferrocarril de La Ceiba cesó sus actividades, la vía Motatán
- Palmarejo fue mejorada, lo que permitió el uso de vehículos automotores y la
construcción de la carretera Mene Grande – Motatán contribuyó aún más a su
desaparición.