Juan Pablo Viloria: Cineasta de profesión, músico por convicción

En medio de luces, trípodes, dos computadoras de edición y una cámara de vídeo, estaba sentado Juan Pablo Viloria, en su lugar de trabajo. Vestía un pantalón marrón holgado de grandes bolsillos y una franela de color amarillo.

El trujillano, de contextura delgada, con una que otra cana en su cabello, al igual que en la barba, y con su constante movimiento de manos, mostró su pasión por el cine, la música y el gran amor por las dos mujeres de su vida.

Juan Pablo Viloria, es Licenciado en Artes mención Cine en la Universidad Central de Venezuela (UCV) con un máster de Guión Cinematográfico en una universidad madrileña.

Trabajó en Caracas en Vive Televisión, La Villa del Cine y El Centro Nacional Autónomo de Cinematografía. Además es hijo del Ex Gobernador, Gilmer Viloria.

A pesar de tener experiencia laboral en el Distrito Capital decidió quedarse en su Trujillo natal porque considera que hay mucho por hacer. Laboró en la Universidad Valle del Momboy (UVM) como docente, y actualmente es el encargado del aula audiovisual de Comunicación Social en el Núcleo Universitario Rafael Rangel (NURR).

Vida universitaria

-¿Por qué trabajar en el NURR?

“Siempre he tenido una vocación latente que es la docencia. Me ha interesado el intercambio con gente que esté dispuesta a emprender y aprender. Esa ilusión del estudiante es algo que a mí me contagia mucho y me estimula para seguir aportando lo que yo humildemente pueda con mi experiencia. ¿El NURR? Porque la Universidad ha sido un espacio para mí muy natural. Muchos de los trabajos que he realizado tienen que ver con la universidad y la formación académica o cercana a ella”.

-Ya que habla de docencia. ¿Impartirá alguna materia en la carrera de Comunicación Social?

“Vengo de ser docente en la UVM, daba clases de Fotografía y estaba a punto de impartir una materia que se llama Producción y Dirección de Cine. A mí me gusta mucho dar clases, a pesar de que éste es un cargo administrativo, y no está vinculado directamente con el aula, ya me han invitado los profesores a hablar sobre lo audiovisual. Yo siempre fui docente. Hay un par de seminarios que se dan en quinto año, uno es de Guión Cinematográfico, que es una de mis especialidades en mi formación académica, y el otro es de Teoría y Critica Cinematográfica. También me viene como anillo al dedo porque mi formación en la Escuela de Artes fue prácticamente el ochenta por ciento de eso”.

Cineasta en Trujillo

La pasión por el séptimo arte brota por sus poros, mientras relata que quiere romper el estigma de que en Trujillo y en Valera no se hace nada. Siempre en la lucha de mandar un mensaje que demuestre que sí se puede hacer cine en este estado, aunque todo esté por hacer. Le resulta interesante emprender este desafío y quizá ser pionero en el área donde hay poco desarrollo.

-Teniendo en cuenta su preparación académica y profesional. ¿Por qué quedarse en Trujillo, donde no hay mucha producción de cine?

“Esa pregunta me la han hecho varias veces y me causa, no molestia, sino incomodidad porque lo idóneo debería ser eso, retribuir de alguna manera lo que uno logró aprender y la formación que uno tuvo, en una medida pequeña o grande, al lugar de donde uno es. En Valera está todo por hacer, no hay muchas experiencias en el área y yo dije: Sería interesante que uno pueda desarrollar algo relacionado a lo audiovisual y al cine aquí”.

-¿Qué lo sedujo a la hora de elegir su profesión?

“Me sedujo el momento en el que pude constatar que podía vincular dos elementos, la música, que siempre me gustó, y el cine. En general no es otra cosa que la reproducción mecánica del movimiento. La dinámica visual de las cosas”.

Mientras crecía en la Urbanización San Isidro, en un ambiente silvestre, jugando futbol y escuchando grandes artistas de la música, el joven fue descubriendo sus pasiones cuando entraba al cuarto de su hermano mayor, donde veía sus discos y películas. Cineasta de profesión, músico por convicción.

-Toca el bajo y la guitarra ¿Por qué el cine y no la música?

“Las dos. El cine ha sido mi profesión porque me formé académicamente para eso, pero el área musical y esa inquietud que tengo por la música es algo más empírico, autodidacta”.

Las mujeres en su vida

Su cara emana felicidad cuando confiesa que está enamorado de María Daniela, su novia; aunque no están casados. Él cree en la unión de dos personas y la fortaleza de la misma. No tiene hijos, pero quiere tener dos “Quiero tener una niña, porque la mujer es lo más hermoso que hay. La mujer tendrá un rol importante en el futuro”.

Cuando habla de su mamá, sus ojos brillan y la nostalgia se siente. “Mi madre es el ser que más me ha influenciado. Sin el apoyo de ella, no hubiese podido hacer nada. Es un ser de luz que me ha guiado. Es la persona en quien confiar”.

-¿Quién es su musa?

“La vida. María Daniela. La mujer”.

Hijo del Ex Gobernador, Gilmer Viloria

Entre risas relató lo gracioso que son las preguntas de cómo había sido su experiencia al ser hijo del gobernador. “Para mí eso nunca fue algo que me haya marcado pero sí me di cuenta de muchas cosas. Gran parte del tiempo de su gestión como gobernador yo estuve en Caracas, en la escuela de artes de la UCV, un ambiente totalmente opuesto a todo lo que tiene que ver con estas cosas de política”. También bromeó al respecto “Hay gente que me echa bromas y yo le digo: Yo soy el hijo frito del gobernador”.

-¿Por qué no siguió los pasos de su padre?

“Yo a mi padre lo respeto. Lo quiero mucho. Tengo una relación muy buena con él. Es una persona que me ha inculcado muchos valores éticos, pero he sido muy rebelde en el sentido político, de hecho me identifico con algunas ideologías que son extrañas, el anarquismo por ejemplo. Nunca me sentí cómodo en ese ambiente, sentí mucha hipocresía alrededor de lo que involucra el poder”.

Al hablar de su padre lo invade la alegría y relata una anécdota para dibujar su posición al respecto, “Venía de la UCV, llego a mi casa, como normalmente lo hacía, y me paran en la entrada dos policías, me empiezan a raquetear. Yo les decía que vivía ahí, en ese momento tenía el pelo largo y un look bohemio, medio hippie. Quedé atónito por todo esto, hasta que finalmente se asomó mi papá por la ventana, los regañó y les dijo que yo era su hijo”, comentó entre risas.

-Actualmente ¿Tiene una posición política?

“Soy crítico de este gobierno, no me parece lo que están haciendo con la vulneración de los valores democráticos, con la vulneración de los derechos políticos. Me parece que el feudo ideológico de este gobierno ha hecho grandes daños”.

-¿Está de acuerdo con la actuación de la oposición?

“La oposición es algo que tiene que existir en todo sistema democrático. Siempre soy crítico, el hecho de que ahorita esté en una posición crítica y opuesta al gobierno no quiere decir que vaya a decir amén a cualquier cosa. Hay que cuestionar, dudar y criticar todo. Simón Rodríguez lo decía, el combustible principal de una sociedad es la crítica. Esté quien esté ahí yo voy a estar criticándolo, esa es mi postura”.

-¿Cómo se definiría en una palabra?

“Transgresor”.